Las isapres informaron el aumento de sus planes en un 7,6% por sobre la UF (porque sí, sus planes están fijados en UF, lo que las protege como a pocos de la inflación), el máximo que les permite la ley, argumentando que de no hacerlo el sistema dejaría de ser sostenible. Coincido con el diagnóstico final, el sistema no es sostenible, pero no sólo para las isapres, sino también para todos los actores del sistema y, fundamentalmente, para los usuarios, a los que hoy se amenaza con llevar a tribunales.
Este año, las aseguradoras han informado de las peores pérdidas en su historia, con resultados que rompen su curva de utilidades, que en 2020 alcanzó los $82.548 millones, un 772% respecto de 2019. Esto, en medio de una de las peores crisis sociales, económicas y sanitarias que ha vivido el país en décadas.
La amenaza de Colmena de iniciar acciones judiciales contra sus afiliados deja en evidencia una vez más la urgente necesidad de contar con un verdadero sistema de seguridad social universal, que asigne a estas instituciones el rol que en la práctica ejercen como seguros privados de salud, basados el riesgo de cada persona, lejos de la administración de las cotizaciones obligatorias.
Dra. Francisca Crispi G.
Presidenta COLMED Santiago