Está demostrado, con evidencias a nivel mundial, que contar con una Atención Primaria de Salud (APS) fuerte, se traduce en grandes beneficios para los países: mejores resultados sanitarios, menores costos y mayor equidad en salud.
En nuestro país, a partir de 2004 se empezó a implementar una Reforma de Salud que contemplaba dar un impulso sustancial a la APS, para conseguir la cobertura necesaria que diera respuesta al mayor número de problemas de salud de la población en la consulta médica, junto con la implementación de programas de promoción, prevención, tratamiento y rehabilitación de la salud comunitaria.
Diez años después, podemos constatar que la política pública no ha abordado con suficiente fortaleza este nivel de atención, amenazando el éxito de este proceso.
Destacan entre sus problemas más graves: La ausencia de una política integral de desarrollo del recurso médico de APS, lo que se traduce al día de hoy, en un significativo déficit de horas médicas en este nivel de atención, que impide el acceso a atención de salud a un alto porcentaje de la población; y la insuficiente resolutividad, entendida como la capacidad de tratar adecuadamente a las personas con enfermedades más prevalentes, con los métodos diagnósticos y terapéuticos necesarios, la derivación oportuna de lo que corresponda, y el desarrollo de métodos eficaces de prevención y promoción de salud en la población.
Pese a que nuestra evaluación es crítica, no podemos dejar de reconocer que ha habido importantes avances en los pocos meses que llevan las actuales autoridades en el Ministerio de Salud (Minsal), lo que contrasta con una década de estancamiento, cuando no de retroceso, especialmente en lo que se refiere a la falta de voluntad del Minsal para abrirse al diálogo con los Médicos APS, lo que llegó a un extremo durante el Gobierno anterior.
En este sentido, cabe destacar entre las medidas implementadas en estos meses: el plan de medicamentos para los consultorios públicos, el incentivo para los médicos especialistas en Medicina Familiar en APS y el Concurso Nacional de Especialidades para Médicos APS, que se encuentra en pleno proceso, con una activa participación de los médicos de consultorio.
Por estas razones, los médicos de Atención Primaria creemos que hoy es momento de trabajar fuertemente para responder a las necesidades de salud de la población, ya que el esfuerzo por mejorar la salud de nuestro país debe ser mayor y consistente en el tiempo, y debe considerar a la Atención Primaria de Salud como su columna vertebral.
Solidarizamos con las reivindicaciones del equipo de Salud aunque no hayamos participado de su proceso de discusión y de resolución de movilizaciones, por lo que no participaremos activamente del paro de este 24 y 25 de septiembre.
Creemos que un cambio de fondo en Salud requerirá de un proceso de diálogo y de encuentro entre todas las organizaciones, sin exclusiones, con puentes de comunicación y alianza para construir una APS fuerte al servicio de las mayorías, y que podamos aunar esfuerzos para impulsar una verdadera Reforma que tenga como eje el fortalecimiento del Sistema Público de Salud.
Instamos al Ministerio de Salud, así como a todos los actores involucrados, a realizar un debate amplio y profundo, con participación inclusiva y democrática. La Agrupación Nacional de Médicos de Atención Primaria estamos disponibles para construir una mayor coordinación entre todo el equipo de Salud, que incluya también a los usuarios, para conquistar el Derecho a una Salud Digna y de Calidad, para todas y todos los chilenos.
Agrupación Nacional de Médicos de Atención Primaria