La judicialización de las alzas de los planes de salud por parte de los clientes, el aumento de las licencias médicas y el incremento en los costos de la salud significó un déficit para las isapres, estimado por el mismo gremio, de $25 mil millones en términos operacionales.
Una de las decisiones que el negocio asegurador tomó, con el objetivo de reducir gastos administrativos, fue cerrar 22 puntos de atención, entre sucursales y centros de atención, entre junio de 2014 y septiembre de 2015.
El presidente de la Asociación de Isapres, Rafael Caviedes, señala que la judicialización “ha obligado a algunas isapres a cerrar oficinas con el propósito de racionalizar gastos administrativos. Es evidente que en un ambiente tan agresivo y amenazante, las isapres deban tomar precauciones con aquellos costos que puedan reducir”.
La isapre Consalud es la aseguradora que más sucursales y puntos de atención ha cerrado, con nueve locales menos. Le sigue Vida Tres, que habría prescindido de tres sucursales, lo que significaría un 10% de su total. En tanto, Banmédica, ha cerrado seis puntos de atención, y Colmena, tres. La isapre Cruz Blanca registra solo una sucursal cerrada.
Fuente: Diario El Mercurio