Desde hace dos años, el Colegio Médico de Santiago ha puesto en marcha una iniciativa innovadora destinada a mejorar el bienestar de los Médicos y Médicas Mayores: un programa integral de talleres enfocados en su salud física, mental y emocional. La oferta de talleres ha ido evolucionando, adaptándose a las necesidades e intereses de los participantes. Además, la incorporación de actividades como el taller de canasta y yoga ha sido una de las novedades más destacadas, sumándose a un programa que busca estimular diversas áreas de la vida de los profesionales. Este programa no solo busca mantener a los colegiados activos, sino también brindar un espacio de encuentro social y de fortalecimiento de los lazos entre colegas.
Un programa integral para el bienestar de los médicos mayores
La Dra. Wanda Fernández, presidenta de la Agrupación de Médicos y Médicas Mayores, explica: “Lo más importante ha sido cómo estos espacios han permitido que los médicos mayores se mantengan activos, no solo físicamente, sino también mental y emocionalmente. Hemos logrado crear un entorno donde cada taller aporta al bienestar integral de los colegas, y lo más gratificante es ver cómo esto impacta en su calidad de vida ya que estos espacios no solo les permiten desarrollar nuevas habilidades, sino también fortalecer su sentido de pertenencia y seguir siendo productivos en esta etapa de sus vidas”.
Carolina Pérez, trabajadora social de Colmed Santiago y encargada de la agrupación, detalla que los talleres están diseñados para cubrir cuatro áreas fundamentales: funcional, cognitiva, social y psicológica. “Queremos abordar todas las dimensiones de la vida de una persona mayor. En el área funcional tenemos talleres de yoga y baile, que promueven el ejercicio físico. En el ámbito social, ofrecemos actividades como tejido, canasta y banda. En la parte cognitiva, destacan los talleres de memoria, alfabetización digital y canto. Finalmente, en el área psicológica, contamos con actividades como historia de vida y acuarela, donde los médicos pueden resignificar sus experiencias a través del arte”, comenta Pérez.
Nuevas incorporaciones: Yoga y Canasta
Uno de los talleres más recientes y populares es el de yoga, en el que participa la Dra. Pamela Luksic desde marzo de este año. “El yoga es un espacio que me permite hacer ejercicio físico y, al mismo tiempo, socializar con otros colegas. Para mí, la vida social que se genera es tan importante como la actividad física y retomar el contacto con el Colegio Médico a través de esta actividad ha sido fundamental en mi vida personal y social”, añade la Dra. Luksic.
El aspecto social ha sido tan relevante como el físico. “Lo que más me ha sorprendido es cómo el yoga también se ha convertido en un espacio de socialización. No solo trabajamos el cuerpo, sino que después del taller nos quedamos conversando, compartiendo experiencias. Es un lugar donde te sientes acompañado”, afirma Luksic. Este tipo de interacción ha permitido que los participantes mantengan no solo su salud física, sino también su bienestar emocional.
Otra adición reciente ha sido el club de canasta, que responde a la alta demanda de actividades que combinen el estímulo mental con la interacción social, la Dra. Marion Belmonte, una de las impulsoras del taller, comparte su experiencia: “Yo aprendí de pequeña a jugar canasta y hubo muchos años donde no jugué. Junto a Carolina, fuimos las impulsoras de crear el Club de Canasta. Es un juego entretenido, donde hay que pensar, conversar y también compartir con otras personas. Por eso, es algo dinámico, ya que uno puede socializar y activar la memoria.” Para la Dra. Marion, este taller ha sido una forma de salir de la rutina: “Me saca de la rutina, ya que vivo sola y enviudé hace dos años. Esto me hace sentir acompañada, además, vivo muy cerca del Colegio y vengo caminando.”
Por su parte, el Dr. Oscar Jiménez destaca cómo su motivación principal ha sido socializar, “yo nunca había jugado, pero aquí en el taller he aprendido durante estos seis meses en los que estoy asistiendo, sin embargo, mi principal motivación es socializar, ya que vivo solo y no tenía con quién conversar“. El Dr. Jiménez también participa en otros talleres, como el de alfabetización digital y el taller de memoria. “La socialización es lo principal que me motivó a participar de estos talleres y también poder ocupar el tiempo ya que al venir y ocupar tres mañanas a la semana, es algo que me satisface mucho. Al estar en este taller, he podido mejorar la memoria y pensar en cómo mejorar las técnicas y habilidades de este juego. Al no ser un juego competitivo, me gusta mucho más para distraerme y conversar con mis colegas“.
Movimiento, socialización y expresión artística
Otro de los talleres que ha captado gran interés es el de baile, una actividad que ha permitido a los Médicos y Médicas Mayores mejorar no solo su agilidad física, sino también su bienestar emocional. La Dra. Isabel San Martín, participante activa del taller, comenta: “El baile me ha beneficiado mucho en la parte motora y física. Me siento más ágil, pero lo mejor de todo ha sido reencontrarme y compartir con colegas”. Para muchos, este espacio ha sido una oportunidad para revitalizar la energía y volver a conectarse con antiguos compañeros de profesión, generando un ambiente de compañerismo y apoyo mutuo.
Este taller no solo fomenta el ejercicio físico, sino que también tiene un impacto profundo en la autoestima y el sentido de pertenencia de los Médicos y Médicas Mayores. La Dra. San Martín concluye: “El baile me ha permitido no solo sentirme más ágil, sino también reconectar con otros colegas, lo que ha sido una experiencia enriquecedora”. Así, el taller de baile se ha consolidado como un espacio clave donde los participantes no solo se mantienen activos, sino que también encuentran nuevas formas de expresión artística y socialización, lo que refuerza la importancia de estos espacios en su día a día.
El futuro del programa: más inclusión y crecimiento
El éxito del programa no solo se refleja en el crecimiento en el número de participantes, sino en la calidad de las experiencias que ofrece. Los talleres han permitido que los Médicos y Médicas Mayores mantengan un estilo de vida activo y, al mismo tiempo, sigan conectados con la comunidad médica, algo esencial para su bienestar emocional y social. “La clave del éxito ha sido ofrecer actividades que realmente les apasionen y que contribuyan a su desarrollo integral”, afirma Carolina Pérez, trabajadora social.
Con más de 250 participantes regulares, el Colegio Médico de Santiago se ha comprometido a seguir expandiendo la oferta de talleres y actividades para médicos mayores. “Queremos seguir creciendo y ofreciendo espacios inclusivos donde nuestros colegiados puedan aprender, compartir y disfrutar de actividades que les sean significativas”, señala Carolina Pérez. Asimismo, la Dra. Wanda Fernández, presidenta de la Agrupación de Médicos y Médicas Mayores comenta: “Cuando uno lee sobre cómo enfrentar el envejecimiento de la población, lo que se recomienda es justamente lo que estamos haciendo: brindar un espacio para mantener tanto el bienestar físico como el cognitivo y emocional. Este programa está marcando una gran diferencia en la vida de nuestros médicos mayores, y estamos seguros de que seguirá creciendo.